'Weapons': El Terror en el Silencio
- Violeta Reyes Gutiérrez

- 9 ago
- 2 Min. de lectura
Weapons es la nueva propuesta de Zach Cregger tras Barbarian (2022), que nuevamente apuesta por un suspenso lleno de silencios. La historia se sitúa en la ficticia localidad de Maybrook, donde 17 niños desaparecen simultáneamente a las 2:17 a.m., todos menos uno. Justine Gandy (Julia Garner), su profesora, encuentra en clase únicamente a Alex Lilly, un niño que parece guardar un secreto. A partir de ahí, la desaparición se convierte en un misterio que envuelve a toda la comunidad.

La cinta destaca por su estructura poco habitual en el género, dividida en episodios que exploran el punto de vista de distintos personajes involucrados. Este formato fragmentado eleva la intriga y mantiene la tensión de principio a fin, dejando instalada de manera constante la pregunta sobre qué fue lo que realmente ocurrió.
El tercer acto amplía el alcance de la película al introducir un subtexto que dialoga con el abuso psicológico en la infancia y el peso que conlleva el trauma. A través de la historia de Alex, se muestra cómo el verdadero terror puede residir en lo que no se dice por miedo y en la amenaza constante de la manipulación.
Aunque en pantalla esta dinámica se presenta de forma casi caricaturesca, conecta con la psicosis norteamericana en torno a los conflictos y episodios de violencia en aulas escolares, un temor profundamente arraigado que marca la vida de comunidades enteras.

Con claras referencias a ‘The Shining’ de Kubrick —reconocidas por el propio Cregger en entrevistas recientes—, el director introduce el enigmático “2:17 a.m.” como guiño al mítico Room 217 de la novela de Stephen King, acompañado de varios elementos visuales que evocan la atmósfera del Overlook Hotel.
Weapons cierra con un desenlace que mezcla subtexto y exceso, consolidándose como una de las propuestas más refrescantes del terror reciente. Su estructura, la solidez de sus actuaciones y la capacidad de abrir espacio a interpretaciones más profundas la convierten en una película que intriga e invita a reflexionar después de que las luces de la sala se encienden.




